Compras en Santa Catalina
En Santa Catalina hay un par de buenas opciones para comer, todas ellas situadas al este de la ciudad, en la carretera que termina en el Oasis. Por lo demás, los hoteles y albergues incluyen comidas en sus paquetes o disponen de cocinas para cocinar por cuenta propia. Ninguno de los restaurantes tiene teléfono ni acepta tarjetas de crédito; los horarios son sólo orientativos, nunca se cumplen a rajatabla durante las semanas de menos afluencia; y aunque los restaurantes abren todos los días, a veces cierran los lunes. Blanca’s es un local y el primero que se cruza en el camino. Sirven deliciosos desayunos y abren todo el día, de 8.00 a 22.00 (más tarde los fines de semana). Los platos del almuerzo y la cena son los habituales de carne o pescado al estilo panameño con arroz y frijoles. Jamming es una pizzería italiana con una docena de deliciosas pizzas de masa fina hechas en horno de barro. El ambiente aquí es de reggae y ron, y hay una barra y un par de mesas en un rancho al aire libre con cabañas de paja: este restaurante es un punto de encuentro y lo que pasa por ser la vida nocturna de la ciudad. El Jamming está abierto desde las 6:30 hasta las 10 o 10:30 de la noche. Hay una Parrilla Argentina, propiedad de dos surfistas argentinos, con deliciosas carnes y pescados a la parrilla acompañados de ensalada y patatas. La última vez que estuve allí, aún no tenían licencia para vender alcohol, así que todavía puede ser BYOB. Abierto de 19.00 a 22.00.
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Santa Catalina es una zona de moda y popular en el centro de Palma con un gran ambiente y un animado mercado interior con verduras frescas, carne y pescado de Mallorca. Las pintorescas calles que rodean el antiguo barrio pesquero están repletas de agradables cafés y restaurantes.
Palma tiene algunos restaurantes estupendos y Santa Catalina en particular ofrece algunos de los más modernos y mejores restaurantes. Lo hemos reducido a nuestros seis mejores restaurantes en Santa Catalina. Esperamos que le gusten tanto como a nosotros.
Para los que aún no han descubierto la fantástica comida peruana, vamos a recomendar ahora el restaurante peruano Sumaq, realmente bueno, bajo la dirección de la chef Irene. Platos típicos, que estamos acostumbrados a ver en la cocina peruana, como ceviches, tiraLos ditos y causas se mezclan con platos exquisitos como el bistec de cordero australiano y el pulpo flameado al pisco. Mi recomendación personal es el lomo saltado en compañía de un pisco sour.
Naan ofrece una completa gama de comida callejera de todo el mundo. Los tacos de pescado son deliciosos, la sopa ramen japonesa con cerdo, algas y miso es saciante y sabrosa. Ofrecen todos los platos en dos variedades dependiendo de si se quiere compartir o no. Una excelente opción si quieres probar varios platos de diferentes partes del mundo en pleno centro de Palma, sin tener que desplazarte lejos.
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El sol, el mar y las agradables temperaturas durante todo el año no son las únicas razones para viajar a Mallorca. La capital de la isla, la bella Palma de Mallorca, y el prometedor barrio de Santa Catalina ya son razones suficientes para ir. El antiguo barrio del puerto, al oeste de la ciudad, ha ido ganando reputación como auténtico barrio gastronómico. A diferencia del resto de Palma, aquí las calles están dispuestas en forma de cuadrícula. A lo largo de estas calles, encontrará un restaurante tras otro, lugares tranquilos y sin pretensiones, con mesas de madera, sillas antiguas y pizarras con menús escritos con tiza. Uno mejor que otro y perfecto para un viaje gastronómico en cualquier época del año, pero sobre todo cuando hace demasiado frío para ponerse el bikini.
Bautizado con el nombre del surfista hawaiano Duke Paoa Kahanamoku y fundado por dos amigos, este lugar parece un chiringuito de playa con un menú que mezcla lo mejor de Asia, el Mediterráneo y Sudamérica. El chef Ronny tiene una gran experiencia con estrellas Michelin y mezcla brochetas griegas de cordero con tacos mexicanos veganos al estilo de Baja California.
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El Bar Joan Frau es una visita obligada para quien visita el barrio o el mercado. Lleva 5 décadas sirviendo deliciosa cocina mallorquina, convirtiéndose en un verdadero referente en Santa Catalina y Palma. Son muchos los que se acercan al Bar Joan Frau para probar alguna de sus especialidades y luego visitar los diferentes puestos del mercado.
La familia Frau elabora diariamente recetas tradicionales de la cocina mallorquina con producto fresco de la isla. Tapas espectaculares, masas para tartas dulces y saladas elaboradas diariamente, “llonguets” tradicionales (panecillos típicos de Palma), “pa amb olis”, exquisito café… seguro que disfrutará de su visita.
